
Señá Cleofas
¿Qué enseñaba Señá Cleofas? Misterio. Quizás si hubieran hecho esa pregunta a los padres o tutores o encargados de las víctimas, hubieran contestado ingenuamente, a la camagüeyana, que mandaban los muchachos a la escuela, para que los tuvieran sentado...

Jesús revelado por el arte
El fondo ascético del cristianismo se descubre admirablemente en las escenas que ha tratado de preferencia M. Tissot, en lo que pudiera propiamente llamarse su exégesis pictórica. Todo en esos cuadros habla profundamente de la irremediable miseria de...

Carta a Ramón A. Catalá
Esto me apena mucho, pues solo quise darle una broma, a la vez que fijar la acentuación empleada por mí en la palabreja seña.

Seña Cleofas, seña Cleofas (carta abierta a Gonzalo Aróstegui)
Me basta con defender la acentuación genuina, la de nuestra patria, la de nuestra gente. Por esto la llamo enfáticamente genuina.

El feminismo de antaño
¿No cabría suponer que las costumbres de la época no eran tan contrarias, como suponemos, a que las mujeres de la clase acomodada se dedicasen a graves estudios?

Manual del perfecto sofista
El toque está en no darse nunca por vencido; y si nos aprietan, queda el recurso supremo de meterlo todo a barato; porque ya se sabe que en una zurribanda, el que más gallea, el que más grita y el que más pega es el que se lleva de calle todos los suf...

La Niobe americana
No eres de roca tú; los que impasibles / Miran, sin espantarse, tu tormento, / Son los que tienen corazón de piedra.

El libro de un periodista
El periodista de verdad tiene que ver más que los otros y oír más y estar en más lugares y conocer más personas y conocerlas mejor; y ve, oye, habla e interroga, para exprimir todo el jugo de lo que ha recogido en algunas pinceladas felices y en algun...

Escuela de periodistas
He llegado a la conclusión de que después de fundar la escuela de periodistas va a ser necesario establecer la de lectores de periódicos. Y quizás fuese lo más acertado fundar esta primero.

El periodismo y la literatura
Lo que más importa a los pueblos modernos es tener conciencia clara de sí mismos, de su vida, con sus múltiples funciones. Para ésto necesitaban un órgano apropiado, y éso ha venido a ser el periódico.
El periódico moderno
Ni los males individuales, ni los colectivos, se han curado jamás ocultándolos.
Rarezas
La prensa mendaz fomenta el espíritu de mentira. Ningún otro degrada más a los pueblos.

Mirando adelante
Nuestra tendencia es a vivir del presupuesto, no de la tierra.

Amor (Fragmentos de dos teorías del amor)
Así es como entiendo que el artista enamorado de su obra, que debemos encontrar en el esposo experto, ha de tratar la inteligencia de la esposa: Arrancará sin temor todos los velos en que la han envuelto la ignorancia, las preocupaciones, el fanatismo...

No smoking
Piensa siempre que la presencia de otro limita tus antojos, en la misma proporción que tu compañía limita los suyos. No se ha inventado, ni se inventará otra fórmula para andar en paz y sosiego por el mundo.

Por ferrocarril
Y es el proceso de la vida entera seguir, correr, volar... sin que sepamos cual será el fin de la fatal carrera.

Dos voces en la sombra
—¿Dónde vas con la frente siniestra, El labio mordido, jadeante el corcel? —A escupir a los pueblos abyectos Que besan sumidos de un déspota el pie.

Once de mayo
Llora, Cuba humillada y macilenta, nota que tanto mal te vaticina, y de ese campo de pavor y ruina fija en tus ojos la visión sangrienta.

A barrer
Como no lo sé, no digo lo que le pasaría. Mas sin extremar tanto la materia, ni poner el gesto tan avinagrado, vuelvo á mi tesis, mucho más inocente y menos mortificante, de que debía cada cual hacer por escobar los rezagos del caduco régimen anterior...
Sobre el autor
Enrique José Varona (Camagüey, 1849-La Habana, 1933) es considerado uno de los más influyentes intelectuales cubanos de finales del siglo XIX e inicios del XX. Desde muy temprano, siendo aún estudiante de las Escuelas Pías de su ciudad natal, inició sus colaboraciones literarias con El Fanal, también de Camagüey. En 1867 obtuvo el premio del Liceo de Puerto Príncipe por su Oda con motivo de la muerte de Gaspar Betancourt Cisneros. Dirigió el periódico Patria tras la muerte de Martí.