La historia de la acogida del Espejo de paciencia es, con mucho, de una importancia desmedida para el valor intrínseco de este...
Luis Pichardo Loret de Mola, escribiendo lejos de la gran ciudad que es La Habana, más cerca de la substancia de la patria y d...
Cuba no es sólo un país en revolución, sino también en guerra, ya lo hemos dicho en otra ocasión, y al triunfo de ambas todo h...
Deseo mucho que puedas al fin ir al pueblo que elijas, no tanto por mí como por mi hijo; se acerca el tiempo en que el niño no...
Ni tradicionalista por sistema, ni revolucionario por moda, es lo que precisa no ser para pensar con acierto y rectitud.
Sin conservar nada de hostilidad, tampoco ofrece atracción hospitalaria, sino que desde que se pone el pie en el dintel del po...
No todos los insatisfechos se vuelven escritores, pero todos los escritores viven insatisfechos. Al menos los genuinos. Hay un...
La ciudad es grande; sus calles son torcidas, parece que juegan en zigzag para engañar al transeúnte; en cada piedra parece qu...
Al escribir esta página en homenaje a Ana María Pérez Pino, bastaría tal vez con afirmar que ella pudo estar en la fundación d...
Camagüey, señores, tiene su pasado... que ya está pasado, hablando con franqueza. Nosotros constituimos ahora un pueblo que pu...
Para los que amamos sinceramente las cosas del Camagüey antiguo han de tener fresco y profundo encanto los giros, expresiones...
Cada vez que se produce una perturbación en nuestro clima político, Varona es el oráculo a quien acuden los románticos impenit...
No sé nada de lo que pueda traernos entre sus pliegues el mañana. Hemos hecho los cubanos lo humanamente posible por embrollar...
Escritores de Camagüey, saben de sobra que la dignidad de su profesión y su verdadera utilidad social depende de la unidad col...
Existe un mal en la sociedad que, según sea el remedio con que se pretenda curarle, produce efectos diametralmente opuestos: e...
Yo, que creo en los Reyes, aunque parezca mentira y que me siento tan niño como el que más, estoy tomando mis medidas.
¡Los hombres son buenos, pero hay que iluminarlos con luz del cielo...!
A partir de hoy no podrá decirse con propiedad que se va “a comprar” a La Gran Señora, sino que se va “a que le regalen”.
Como es natural, es mi deber felicitar a todos mis lectores, a mis amigos, aunque no me lean, y en general al culto, noble, he...
Ayer fue el Día de los Santos Inocentes y la clásica fecha sirvió para que la mentalidad popular gozara “cogiendo” a los que s...
Cuba está de fiesta. Hermoso es su júbilo y sano y fortificante. Muchas lágrimas, cruentos martirios le cuesta la hora present...
Para los que sostienen la pobreza del pueblo cubano, esta inusitada alegría que ha caracterizado a las tradicionales cumbancha...
Una duda me asalta, a pesar de todo, y es la que se refiere al medio que debo emplear para felicitar a mis amigos.
Es un deber preservar esta tribuna de las luchas y agitaciones de los partidos; protegerla, como de un mal contagio, contra la...