Alza tu voz sobre la voz sin nombre de todos los demás, y haz que se vea junto al poeta, el hombre.
Y es el proceso de la vida entera seguir, correr, volar... sin que sepamos cual será el fin de la fatal carrera.
¿Dónde fueron los pulcros viejecillos de guayabera blanca y de sombrero, que tomaban el sol junto a los hierros del parque...
Ay, ¿por qué este tenerte sin tenerte? Este llanto ¿por qué, no la alegría? ¿Por qué de mi camino te desvía quien me vence...
Exóticos jardines de un hotel que ya no existe...
Y se acerca lo humano a lo divino con semejanza tal cuando me besa que en brazos de un espacio me reclino que en los confin...
Él es de la falange que a la tierra / viene del centro de la luz divina.
Adiós a Nueva York, adiós a Prometeo rígido, presintiendo ya la piedra a que debía apretarse…
Huid de contribuir, ni siquiera con vuestra presencia, a la realización de aquellos actos, más que políticos bochornosos e inn...
Legendaria ciudad noble y sencilla: / las gentes sanas, las costumbres viejas, / los patios flores, las ventanas rejas, / mezc...
Camagüey, se van tus rejas, / se van tus costumbres santas, / ya se fueron tus volantas, / Camagüey, ¡cómo te alejas!
No intento dar una respuesta exacta y absoluta sobre el tema. Dedicaré el trabajo a explicar la azarosa evolución arquitectóni...
Hospital de San Juan Dios, así se hacen las cosas: ¡haciéndolas!
Pocos autores han sido objeto de tan contradictorias apreciaciones como Gertrudis Gómez de Avellaneda. Elogios y vilipendios h...
Tendido el blanco pliego sobre el escritorio, la flexible pluma asida entre el pulgar y el índice de la derecha, la cerdosa pa...
El problema del vestido lo tengo resuelto ya: un modelito precioso: será de organza rosá con un escote muy bajo y con falda ac...
Nunca he olvidado el deleite con que escuchaba a Francisca, y cuando ahora, al cabo de tanto tiempo, se me pide que escriba un...
Último en el grupo de familia cuyos poemas reunió en una edición para venderla en provecho de la viuda y la huérfana de su her...
—¿Dónde vas con la frente siniestra, El labio mordido, jadeante el corcel? —A escupir a los pueblos abyectos Que besan sumi...
Voy atravesando valles, / voy parando en el batey, / voy fijando mil detalles, / voy camino a Camagüey.
La ventanilla alzada se va deslizando subrepticiamente, gravemente —por efecto de la gravedad— con el sacudir del tren. He cal...
En la madrugada del 4 de noviembre de 1868 Enrique José Varona veló sus armas en el Paso de las Clavellinas, junto con otros s...
Comenzaré por una afirmación ingenua y riesgosa: “Yo he inventado la poesía”. No hay por qué sonreír. Esto es verdad, y al que...
¡Adiós, patria feliz, edén querido! ¡Doquier que el hado en su furor me impela, tu dulce nombre halagará mi oído...