Dicen que el viento la ha trastornado.
Que le ha soltado
la cabellera.
Que la ha dormido
sobre la roca de una ribera,
allá, en lo alto. Yo no sé dónde.
Que le ha esparcido
la cabellera
sobre los mares, en donde moja
la cauda bruna. Hasta que el día suba a la roca de la ribera,
y la despierte. Y hebra por hebra se la recoja.
Majestic, vía New York - Francia, enero de 1923