Habana 18 de Septiembre de 1892
Mi excelente amiga:
Carta a Aurelia Castillo (18 de septiembre de 1892)
7Carta a Aurelia Castillo (18 de septiembre de 1892)
7Puesto que usted se empeña, no tengo inconveniente alguno, sino, por el contrario, experimento una viva satisfacción, en que se lea o reciba alguna composición mía en la velada que prepara el Liceo a favor de la Srta. Mercedes Matamoros. Pero exijo, amiga mía, dos condiciones: primera, que no sea yo mismo el lector o el recitador, porque no tengo gracia para ninguna de ambas cosas; y segunda, que no se me invite para la velada, porque me es de todo punto imposible asistir.
¿Qué composición deseo que se escoja? Cualquiera de ellas. Creo que ninguna tiene efecto para ser recitada. Así, pues, elija la que le guste y la que juzgue adecuada para el caso.
Ardo en deseos de leer el prólogo que ha escrito usted para el tomo de la inspirada poetisa cienfueguera. Pero eso sí, no quiero que me lo lea nadie, sino leerlo yo mismo a solas, porque gozo más de esta última manera y aprecio mejor la belleza de lo escrito.
Gracias por todo y, con recuerdos al señor González, se despide de usted su entusiasta admirador y amigo
Julián del Casal
Conservada en el Museo Provincial Ignacio Agramonte, Camagüey.
El Camagüey agradece a Xiomara Lezcano la posibilidad de publicar esta carta.
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Comentarios
María Antonia Borroto
3 años¡Una carta de Casal a Aurelia Castillo conservada en el Museo Provincial Ignacio Agramonte de la que no teníamos noticias! Agradezco a Xiomara Lezcano haber tenido noticias de ella y la posibilidad de publicarla. Poco a poco nos acercaremos a los fondos de Aurelia en esta institución. ¿Habrá allí otras cartas cruzadas entre ella y Casal? Los de El Camagüey y Leonardo Sarría —el primero en saber la buena nueva— nos lo preguntamos. Seguimos en El Camagüey empeñados en mostrar los vínculos entre los cubanos ilustres, esas corrientes de simpatía que los unían, las maneras para colaborar con proyectos ajenos... Eso dice mucho de ellos.
Javier Vázquez
3 añosEsta carta es un tesoro. Solamente por este hallazgo este sitio web merece ser reverenciado. Están haciendo un trabajo formidable. ¡Felicidades!
María Antonia Borroto
3 años@Javier Vázquez Eres muy amable.
Javier Vázquez
3 años@María Antonia Borroto Al contrario. Es apenas un acto de justicia. Están haciendo mucho y con muy pocos recursos. Eso es admirable.
El Camagüey
1 año@Javier Vázquez: Gracias.
María Antonia Borroto
2 añosAy, Casal... Justo ahora releo un precioso y brevísimo ensayo donde Gastón Baquero, al hablar de la correspondencia entre Verlaine y Casal, escribe: "Carta inútil. A pesar de que le fue leída, con trémula vocecilla de alondra huérfana, por Juana Borrero a Julián del Casal, su inapresable Julián. De su melancolía no se sacaba ya nadie, ni siquiera Baudelaire si viviese. "Saboreó un instante la música derramada por el fauno en su alma, pero volvió a encerrarse en sí mismo. No dijo más. Estaba maduro para la muerte, como la fruta a punto de desprenderse del árbol. Nada ni nadie podía serenarle ya la angustia de llevarse en peso a sí mismo por las llanuras de la vida. Verlaine le acercó, como una extremaunción, la palabra vivificadora de la Poesía". (El ensayo en cuestión es "Casal: alguien le tendió su mano", y aparece en Una señal menuda sobre el pecho del astro. Pensé comentar algo, pero, ¿qué añadir a palabras tan exactas y tan preciosas? ¿La melancolía de Casal es acaso la nuestra? ¿Su manera de ver Cuba, de describir Cuba, en particular el período entre guerras, donde, como decía, la tormenta no acaba de estallar, ni asoma el disco dorado del sol, es válida para la Cuba de hoy? Sea como sea, somos muchos los que nos sentimos muy cerca de él, así fue en 1993, el año del centenario de su muerte, así sigue siendo hoy, treinta años después.
El Camagüey
3 mesesEsta carta, y otra, también a Aurelia Castillo, conservada en Camagüey, fueron dadas a conocer por Emilio de Armas en el periódico provincial, "26", de Las Tunas. Al respecto, el propio Emilio nos explica: "Estas dos cartas aparecieron originalmente en el periódico 26 (Las Tunas, 11 de marzo de 1984), precedidas de una breve introducción mía. Me había comunicado con mi amigo Carlos Tamayo, quien enseguida se interesó por darlas a conocer como un adelanto de mi epistolario Julián del Casal: El poeta en sus cartas. El libro quedó en Cuba y no se publicó hasta el año 2000, en una edición de 50 ejemplares a cargo de la Editorial Dos Ríos, de Nueva York. Pero las dos cartas de Casal a Aurelia Castillo de González aparecieron antes en mi artículo “Julián del Casal: El poeta en sus cartas” (Cuban Studies, University of Pittsburgh Press, 1999, p. 121-128). El artículo puede leerse en la siguiente dirección de Internet: http://bit.ly/3BWIAQP." En breve El Camagüey publicará un texto de Emilio de Armas a propósito de sus indagaciones en torno a la correspondencia de Casal.